1/5/11

Javier Vicedo (Presencias Reales: la poesía española actual)


Revista Ping Pong ¿Cuál fue tu primer contacto con la publicación: recitales, revistas, premios…?
Javier Vicedo -Yo vengo de una ciudad bastante pequeña y con una actividad cultural muy baja, sin embargo hasta en una ciudad de tales características fue posible encontrar un grupo de entusiastas que se reunían en torno a la poesía bajo el nombre ALCAP. Poco a poco fui aproximándome a ellos (yo tenía unos 19 años) y gracias a su acogida comencé a publicar en su revista, así como a participar en recitales e incursiones pequeñas en la radio.


Revista Ping Pong ¿Cuál es la imagen que piensas que se proyecta de la actual poesía en Hispanoamérica? ¿Consideras que se atiene a la realidad de la actual creación? 
Javier Vicedo -Es obvio que la proyección oficial de la literatura, o de cualquier arte, siempre es un reflejo muy reducido de la realidad literaria del país. Dicha proyección -que se pretende canónica- está manejada por un mercado editorial así como por otros intereses asociados e institucionalizados, es normal que el reductivismo, así como la sobrevaloración de ciertas obras, sean los patrones por los que se rige esta representación de la oficialidad. Sin embargo, también considero que internet en ese sentido ha jugado un papel decisivo y combativo contra lo establecido. Internet es la plataforma mediante la que un lector crítico y exigente tendrá la posibilidad de hallar voces diferentes, y en algunos casos, más interesantes que las propuestas por el mercado o la crítica oficialista. 

Revista Ping Pong ¿En estos momentos conoces o tienes referencias de la poesía dominicana y/o caribeña?
Javier Vicedo -Sinceramente no, sólo conozco ligeramente lo que se está haciendo en Cuba. Luego algunas voces sueltas como las de Frank Báez o León Félix Batista, poco más. 

Revista Ping Pong ¿Consideras que hay algún blog interesante y con repercusión y/o trascendencia en el tejido poético español?
Javier Vicedo -Sí, me parece que hay varios blogs que son imprescindibles para orientarse en dirección a esa lectura exigente que antes he apuntado, por ejemplo; Las afinidades electivas o el blog que gestiona el colectivo de anónimos Addison de Witt. 

 Revista Ping Pong ¿Qué relación mantienes con la poesía latinoamericana? 
Javier Vicedo -Mi poesía suele encontrar muchas vías de influencia en Latinoamérica; pienso en poetas argentinos, chilenos, peruanos o mexicanos, por poner ejemplos. En en plano personal tengo una muy buena relación con bastantes poetas mexicanos, así como algún que otro proyecto en común. México es el país que mejor conozco en ese sentido y considero que su literatura goza de una salud envidiable. 

Revista Ping Pong ¿Y con la poesía europea?
Javier Vicedo -Trato de leer bastante poesía europea, sobre todo para salir un poco del cascarón de la tradición literaria castellana, a veces tan sobria. Sin embargo es complicado tener una lectura tan actual de los poetas europeos como se puede tener de los poetas latinoamericanos, hay que tener en cuenta el problema del idioma. Los poetas europeos que nos llegan traducidos al castellano raramente son jóvenes que puedan estar moviéndose en el mismo tiempo que nosotros, sino poetas ya consagrados en sus países; por ello suele haber cierto desfase que no nos permite estar absolutamente al corriente de lo que ocurre en estos países hoy en día. Lo ideal para un poeta sería dominar varias lenguas y poder leer directamente sin necesidad de una traducción.    

Revista Ping Pong ¿Cuál es tu sensación al encontrarte entre esas dos tradiciones?
Javier Vicedo -Creo que la sensación es de enriquecimiento. No hay otra cosa que pueda ayudar más al desarrollo creativo de un escritor que la variedad de lecturas. Un escritor se forma leyendo, y de la calidad de sus lecturas dependerá también la calidad de su obra. 

Revista Ping Pong ¿Qué relación crees que mantienes con las demás poéticas del estado español?
Javier Vicedo -Si te refieres a las otras lenguas del estado -ya que afortunadamente en España podemos hablar de una cultura idiomática muy rica- es la poesía catalana la que mejor conozco, pues al fin y al cabo yo soy valenciano y he estudiado esta lengua tanto como el castellano. Además la Comunidad Valenciana ha gozado de grandísimos escritores, como Ausiàs March o Joanot Martorell. 

Revista Ping Pong ¿Cuáles opinas que son los referentes literarios a los que miras en tu poética?
Javier Vicedo -Los referentes son muchísimos, pero quizás los nombres más sólidos que formarían la columna vertebral de mi poesía son Luis Cernuda, Juan Gil-Albert, Roberto Juarroz y José Ángel Valente. 

Revista Ping Pong ¿Qué papel piensas que juegan los creadores latinoamericanos residentes en España en la constitución del actual tejido poético?
Javier Vicedo -Su aportación no puede ser otra que la de enriquecer nuestro panorama poético. Cuantas más voces y variadas mayor serán las posibilidades de engrandecimiento de una cultura. Antes me referí a la sobriedad de la poesía española, me parece que los creadores latinoamericanos en concreto vienen a sacudirnos de este exceso de sobriedad. 

Revista Ping Pong ¿Qué consejo le darías al lector dominicano para acceder a buena poesía española?
Javier Vicedo -Que realice una lectura independiente e inteligente. Que se sirva de internet o antologías y juzgue por sí mismo. Que jamás dé por buena la obra de ningún autor sólo porque el mercado marque que esa obra ha de ser de referencia.


Algunos poemas de Javier Vicedo. 

HOMENAJE VERTICAL                         
I
Echamos fuego al agua
y apagamos la transparencia.
Así quema el hombre la claridad del mundo
y la prende de silencio.
El temblor humano del fuego,
el estrépito de una voz abriéndose,
enmudece cualquier palabra.
Al fuego le basta con arder.

 II
No hay palabra más cierta que otra.
Se aprende a callar con los años,
aunque parezca que hablemos.

Se nace sin palabras
y con todas las palabras rotas nos vamos.

Y sin embargo,
aunque vivir sea enmudecer,
existe un placer original en el silencio
que justifica todos los silencios.
  
CIRCULAR
La calle está trazada con pasos circulares,
llena de hombres que andan rodeando su historia.
Es un miedo a vivir, a cruzar desvividas calles
y tener que buscar nuevas palabras,
nuevas geometrías a sus pasos.
Es asfixiar el aire para aferrarse al hombre
cuando es tan sencillo ser hombre
y agradecer la gran suerte de su tristeza.
Este golpe de oxígeno que vuelve,
tras completar su vuelta definida,
lo recuerdan y no parece golpe
pues recordando entienden de algún modo.
No quieren sobresaltos, sino órbitas exactas,
sentimientos atados a una inercia.
Con un sol que comprenden y les alumbra
van celebrando sus dominios,
la redondez de sus ojos y boca,
la forma monetaria de unos senos.
La calle está ahogada por sus pasiones circulares,
y nadie duda ya si son pasiones

AVENIDA DEL GOLF
Doméstico como el secador de pelo de la madre o como el ronroneo  circular de la lavadora en las mañanas. Común como la escoba en la galería o las tazas del desayuno en el fregadero. Previsible como el desorden en la habitación del hijo. Un hogar y su rutina de visiones. La ciudad como una gran casa, la gran casa compuesta por las estancias en que cumplimos nuestras vidas. Doméstico en la ciudad este pelo seco y repeinado, doméstica mi meditación de algo que no acierta a saber su algo; común el deslizarme rítmico por las aceras sucias y esta espera de todos, de siglos, a ser limpiados; previsible mi desorden juvenil en el cuarto alto donde sopeso las apariencias. Nadie ha de extrañarse si se cruza conmigo esta mañana en que camino lento. Nadie que salido de casa, comprenda que cruzarse con un hombre perdido es algo tan cotidiano como escuchar un secador o el seseo de una escoba.   

Javier Vicedo Alós (Castellón, España, 1985)  Reside en Madrid. Es autor de los libros Ventanas a ninguna parte (Ed. Pre-textos, 2010), La última distancia (Ed. Puerta del Mar, 2010) y del cuaderno de poemas El azul silencio del hombre (Ed. Aula de Poesía, 2008). Con sus obras ha obtenido el IV Premio de poesía Bancaja de Creación (2007) y el II Premio de poesía Joven de RNE (2010). Durante el 2008 fue residente de la 6ª promoción de la Fundación Antonio Gala. En la actualidad estudia Filosofía en la Universidad Complutense de Madrid.