15/10/16

Poemas de Marta Jazmín



En esta piel arrugada

del papel en mis manos
transpiran líneas temblorosas,
los gemidos ilegibles
de un animal enjaulado.
Mis dedos
como agujas
demarcan su tiempo
en la sombra,
ahuyentan en manadas
mis palabras.

Intento traducir por fin
mi voz
en esa fiera.
Sacudir mi instinto
en su equilibrio,
irme con ella a tientas
por encima de la poesía
que no escribo,
-la poesía que sospecho-
antes de cerrar
la mentira encarnada
en esta peligrosa caricia
y que otra vez
me devore en su blancura
el silencio.

Sapiencias 

Cuando estás dentro de mí
No sé si naces
o llegas del pasado.
No sé si el deseo se hunde
o deviene externo.
No sé si dentro de mí existe
lo que buscas.
No sé si una cáscara.
No sé si el amor.
Sé que mi vida tendida
debajo de tu lámpara
es lo mismo que un tabernáculo
de soledades y concurrencias
que se corresponden
como un abrir y cerrar de luces
cuando los ojos no existen
y yo puedo verte.

Engendro

Me he refugiado en el vientre
de una paloma gris solitaria.
He desistido de mi humanidad
por descansar en sus vísceras inermes.
Presiento cómo la circunferencia de su aviario
más temido me engendra
Pero tu ausencia
siempre es más voluptuosa
que todas mis deformidades.

No sé otra forma de decir

antídoto
vuelo
valentía.

Me sale pronunciar
culebra
araña viuda
pájaro muerto
vacío.

Sé muy bien que la realidad sucede
primero que sus nombres.
y que antes de la formación del mundo
ya habitaban los miedos
en la boca.
así en su forma real
de letras no concebidas.
en sus cuerpos sin inventar
fríos
estampados
peludos
cóncavos
gravitantes.

El lenguaje siempre ha sido eso:
una procesión de animales peligrosos
que no nos atrevemos
morder.


La extranjera

Yo vengo de ya no encontrarte.
Solo tengo que ver contigo
ausente, en esta ciudadanía coagulada
del mundo que me transpira.

Si todos hubieran conocido
tus lúgubres signos
superpuestos en mi mapa
como dúctiles atlántidas,
tal vez por fin entenderían
ese extraño acento
del silencio en mis labios
herméticos y con tus besos muertos
adentro.


Conversación entre antípodas

Si miro el sol
enciendo la ironía
de la noche.
Si lluevo
desde mi llanto prematuro
irrumpo
en parajes asolados
y yermos.

Arder también es mojarse.

Y apagar la luz
de mis contornos
tiene la forma
de una mano tibia
que desciende
sobre la madrugada
de otro cuerpo.


Marta Jazmín (1983, Puerto Rico) Es egresada de la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez, donde completó un grado  de Maestría en Estudios Hispánicos.  Se ha desempeñado como redactora de textos  académicos y periodísticos.  Ha sido la organizadora de simposios de literatura y eventos  culturales así como también, ha colaborado con revistas académicas en las facetas de crítica  de arte y creación.  Desde agosto 2012, es profesora del Departamento de Español de la  Universidad de Puerto Rico en Ponce.  En 2014, su primer libro, Luz fugitiva, recibió la primera mención en el certamen de poesía joven El farolito azul, organizado por la editorial Callejón y la librería La Tertulia.  En su blog Realistasrealengos, publica poemas y reseñas de literatura.