18/4/08

Slam, Poesía y Perfomance: Voces de la Poesía Sueca Contemporánea

por Lilian Fernández Hall 




Slam, poesía y perfomance

Muchos de los actuales poetas de Suecia han surgido y tienen aún contactos con la llamada “Poesía en Voz Alta”, “Poesía Slam” o “Palabra Hablada”, modalidad poética que ha tenido gran repercusión en los países nórdicos. La Poesía Slam (Poetry Slam) es una forma de presentar poesía que fue iniciada en 1986 por el poeta norteamericano Marc Smith.  La idea de Smith, que surgió con la finalidad de entretener a los parroquianos del club de Jazz “The Green Mill” de Chicago, fue la de poner en escena una especie de competición poética, donde los mismos autores realizarían una lectura o recitación de sus textos que sería evaluada, a través de un sistema de puntos, por miembros de un jurado seleccionado al azar entre el público presente durante el evento. Los poetas participantes contaban con tres minutos para leer/recitar sus textos y el premio fue inicialmente una suma de dinero. El término “Poetry Slam” refiere a los torneos Grand Slam deportivos, y la iniciativa de Marc Smith (aficionado al béisbol y el boxeo) surgió para dar un poco de vida a los aburridos recitales tradicionales de poesía, donde muchos autores leían mecánicamente sus textos sin crear ningún tipo de contacto con el público presente. La jerga deportiva no se limitó a la denominación de esta forma de perfomance, sino que se utilizó también para denominar a los jurados (“judges”) y al lapso de tiempo estipulado para transmitir los textos: “rounds” de tres minutos, al igual que los del boxeo. 

Esta modalidad de poesía “live” o Poesía Viva fue creciendo y haciéndose cada vez más popular hasta alcanzar un amplio desarrollo en todo el territorio de los Estados Unidos durante los años noventa. 1990 fue justamente el año en que se llevó a cabo el primer campeonato norteamericano de Poesía Hablada. Los certámenes de Poesía Slam presentaban muchas ventajas con respecto a los tradicionales recitales de poesía: por un lado, una revitalización de la tradición oral, donde la comunicación y el contacto directo con el público es fundamental; pero además abría las puertas a muchos jóvenes procedentes del mundo del punk, el hiphop y la música de rock, para los cuales los concursos de Poesía Slam significaron la posibilidad de darse a conocer y de dedicarse a la poesía sin tener necesariamente que canalizar sus textos como letras de canciones. Para muchas personas,  jóvenes y no tanto, que soñaban con una perfomance sobre la escena, fueron los Poetry Slam el espacio propicio para desarrollar sus talentos y muchas personas interesadas por la poesía, pero que quizás veían a esta forma de expresión como algo destinado a un público reducido, elitista o demasiado intelectual para su gusto, encontraron en estos eventos un espacio alternativo a los foros académicos. Los lugares físicos donde se desarrollaron los Poetry Slam fueron variados desde un principio: bares, cafeterías, sótanos de iglesias, locales de distinto tipo; y el público participante era inusualmente activo: por medio de aplausos, silbidos, abucheos o vítores, demostraba claramente su dinamismo y su influencia en el desarrollo del espectáculo.


Y éste fue otro de los aspectos revolucionarios de los espectáculos de Poesía Slam: la inclusión no sólo de un nuevo grupo de poetas, sino también un nuevo tipo de público, distinto al tradicional y reducido público lector de poesía. Aquí la poesía se transformó en algo vital, dinámico, apasionado, inmediato, que ofrecía a los oyentes un papel protagónico y que atrajo grupos que tradicionalmente no se sentían ligados a la poesía. Muchos han interpretado -con una suerte de ingenuidad política- el espíritu popular y comunitario de los Slam, como una expresión artística de la clase trabajadora, afirmando que aunque un poeta escribiera incorrectamente desde el punto de vista gramatical, o con faltas de ortografía, podía igualmente ser exitoso en un certamen de Poesía Slam. Marc Smith decía, sin embargo, que el éxito se debía a que el Slam,  reunía el arte interpretativo con el poético, y que a esta  perfomance se le agregaba la emoción y el nervio de toda competición. Para diferenciarlo de otro tipo de actuación, ya sea teatral o musical, en los Slams de poesía no se permitió el uso de acompañamiento musical ni de ningún vestuario o accesorio adicional. Tampoco se permitió cantar los textos sino sólo su transmisión hablada. El poeta debería encontrarse con su público solamente con un micrófono de por medio, y así crear un atmósfera propicia, en solamente tres minutos. 

Los críticos de la Poesía Slam afirman que este tipo de interpretación favorece a los creadores poseedores de un fuerte carisma personal y que en la evaluación de los textos se premia más al “espectáculo” de transmisión de los textos que a la calidad literaria de los mismos. Por su parte, los defensores de esta forma de comunicar poesía aducen que esta modalidad ha logrado interesar a muchas más personas que las formas tradicionales de transmisión de poesía (presentaciones de libros, recitales) y que es liberador el hecho de que personas comunes y corrientes puedan ejercer de “jurados” de las competiciones de Slam Poetry. Los concursos de Poesía Slam se han propagado con éxito en muchos países de Europa, Asia y América Latina, donde esta modalidad poética sigue muy viva. Desde hace unos años, se realiza en México, por ejemplo, el festival de la UNAM llamado “Poesía en Voz Alta”, que retoma claramente las raíces de los Slam norteamericanos, y recientemente (marzo del 2007) se realizó el Primer Slam de Poesía de México en la taberna Red Fly de la Colonia Roma. 

Poetry Slam en Suecia
El poeta sueco Erkki Lappalainen fue quien introdujo la poesía escénica o Poesía Slam en Suecia en 1995. En 1992, mientras realizaba una gira por los Estados Unidos -visitando Nueva York, Boston, Cleveland  y San Francisco- Lappalainen entró en contacto con Marc Smith, y luego de una perfomance en el ya legendario The Green Mill en Chicago, ante un salón colmado, el poeta sueco prometió a Smith traer a Suecia las competiciones de Poesía Slam. En 1993, se fundó en San Francisco la IOPP (International Organization of Performing Poets), y Erkki Lappalainen fue elegido como su primer presidente. 

En julio de 1995, e impulsado por Lappalainen, se realizó el Primer Campeonato Nacional de Poesía Slam en Suecia, en las afueras de la ciudad de Falkenberg. Compitieron doce poetas jóvenes, entre los que se contaban desde principiantes hasta nombres reconocidos. Ganador resultó el poeta Bob Hansson, quien luego viajaría a los Estados Unidos para participar del Campeonato Abierto de Ann Arbour en Michigan. Ya el año siguiente, en el concurso realizado en la localidad multicultural de Rinkeby, el certamen de Poesía Slam había cobrado renombre y la participación fue mucho más nutrida, contándose también con amplia cobertura de parte de los periódicos, la radio y la televisión sueca. En 1997, el campeonato sueco se realizó en Estocolmo, y la poeta suecofinlandesa Solja Krapu resultó ganadora. En el 98, Suecia celebra la llamada Primera Olimpíada Poética, con la participación de poetas de varias partes del mundo, de la cual sale triunfador el americano Gary Mex Glazner. Desde entonces y hasta la fecha, los campeonatos nacionales de Poesía Slam se realizan anualmente en distintas ciudades de Suecia, donde se puede concursar de manera individual o en grupo, en equipos de entre tres  y cinco personas. Las reglas son las mismas que ideara Marc Smith: un “round” de tres minutos y tres personas seleccionadas de entre el público como jueces. También se utiliza la modalidad del “duelo”, donde dos poetas “compiten” entre sí y el que obtiene más puntos continúa en el certamen. La modalidad de Poesía Slam, también llamada Spoken Word (Palabra Hablada) o, en sueco, Estradpoesi (Poesía de Escenario), ha dado origen a la formación de numerosos grupos de poetas Slam, festivales de Poesía Hablada, antologías de poetas Slam, grabación de discos y hasta un manual de reglas de las competiciones o Poetry Slam. Muchos de los actuales jóvenes talentos de la poesía sueca han iniciado su carrera como Poetas Slam. El campeonato del 2008 se realizará en la ciudad de Halmstad entre el 20 de abril y el 3 de mayo de este año. Los organizadores y poetas encargados del Poetry Slam en Suecia suelen, sin embargo, hacerse eco de la famosa frase del maestro del Slam norteamericano Alan Wolf: “el punto no es el puntaje; el punto es la poesía”.

Solja Krapu, Bob Hansson y Daniel Boyacioglu son tres poetas muy activos en la vida literaria de Suecia y su labor poética ha estado estrechamente ligada a los Poetry Slam. Estos escritores, nacidos respectivamente en 1960, 1970 y 1981, demuestran la amplitud y la vigencia de este movimiento poético en el país nórdico. Dos hombres y una mujer, de distintas edades, de distintas procedencias y residentes en distintos puntos del país.

Solja Krapu



Solja Krapu nació en Finlandia en 1960. A los 16 años se mudó al norte de Suecia con su familia y se instaló en la ciudad de Umeå, donde todavía reside. Krapu es considerada una veterana en el contexto de la Poesía Slam en Suecia: a través de sus contactos con Erkki Lappalainen, participó en la organización de los primeros concursos de Poesía Slam en el país, y fue la ganadora de los dos primeros campeonatos formales (1997 y 1998). Es la única mujer que ha ganado el título dos veces. Ha sido también ganadora de una variante llamada “Improesía” donde el poeta sube al escenario e improvisa sobre un tema. 

A más de diez años de su participación intensa en este movimiento poético, Solja Krapu sigue interesada en toda presentación escénica que le permita interpretar sus textos live frente al público. Cree todavía en la fuerza de la palabra hablada, y afirma que la Poesía Slam puede continuar viva y desarrollarse solamente si encuentra continuas formas de renovarse. “Lo peor es caer en un molde fijo", dice. La pluralidad de voces, el surgimiento de nuevos talentos, es indispensable para que la Poesía Slam siga siendo un factor de relevancia en el desarrollo de las jóvenes generaciones de poetas. Krapu puntualiza la importancia de mantener abierta a todo tipo de impulso a esta forma popular de poesía, evitando que se convierta en una burbuja, en un mundo aparte, aislado, sin contactos con otros actores en el panorama de la poesía actual: en ese caso no sería distinta a ese reducido número de poetas cultos que sólo escriben para ser leídos por sus colegas y algún que otro crítico. Solja Krapu suele también puntualizar lo inusual del éxito de los Poetry Slam en Suecia, un país en el que, por tradición, las competiciones son mal vistas. Le adjudica este éxito al ambiente distendido y abierto a los nuevos impulsos que ha caracterizado hasta hoy al movimiento de Poesía Slam sueco. La Poesía Slam en este país ha crecido, madurado y ocupado nuevos espacios, afirma Krapu, ya nadie frunce el ceño al escuchar este término. Nuevas agrupaciones y nuevos foros se abren continuamente. Los poetas actuales tienen un manejo de la escena que no tenían los de hace diez años atrás. Según Krapu: “la poesía Slam ha formado la poesía actual de Suecia”. 

Un tema sobre el cual Solja Krapu ha discutido mucho es por qué las poetas mujeres ya no alcanzan hasta la cima en el contexto de los Poetry Slam. Además de Krapu, sólo la poeta Irene Karlbom ha sido ganadora del campeonato nacional. Muchas jóvenes poetas se destacan en las competiciones pero siempre son hombres los ganadores finales, por lo menos en los últimos años. Krapu no tiene una respuesta concreta, pero espera que la escena pueda albergar tanto a poetas hombres como mujeres, y que la imagen del poeta Slam no se haya estancado en la figura del joven rebelde.

Solja Krapu es una artista polifacética: ha escrito poesía, novela, literatura infantil y libros para uso escolar. Recorre continuamente el país con sus actuaciones y lecturas de poesía. Es además artista plástica y profesora de dibujo y pintura. Ha publicado los poemarios: Jag behöver busschauffören (Yo necesito al conductor del autobús) en el 2003 y Det började så oskyldigt med diskbänken (Todo empezó tan inocentemente en la cocina) del 2006. Su novela Mogen för skrubben (Lista para empuñar el trapo de piso) se publicó en el 2005. Con su primer libro para niños Lille Ville (Guillermito) de 2005, ganó el premio Slangbella, como el mejor debut del año en literatura infantil. Actualmente prepara su segunda novela. La poesía de Solja Krapu está pensada fundamentalmente para ser leída en voz alta, y a su último libro de poesía lo acompaña un CD. Solja Krapu trabaja, sin embargo, para que sus poemas sigan teniendo validez aún en la página escrita. Esta poeta (que tiene como favorita y guía la figura de la poeta suecofinlandesa Edit Södergran) ha sido llamada una poeta de lo cotidiano, con humor y chispa. Ella misma espera, sin embargo, que los lectores encuentren también la seriedad y lo trascendente detrás de la risa. Dice Solja: “el humor es mi linterna en la oscuridad, hasta los macarrones pueden ser objeto de profundas disquisiciones poéticas. A mi parecer, no hay temas elevados y temas de menor valía. Lo de todos los días: eso es la vida”.

A continuación poemas de  Solja Krapu extraidos  del libro  Jag behöver busschauffören. Dikter (Yo necesito al conductor del autobús. Poemas). Estocolmo, Ord & Visor, 2002. Versiones al español de Lilian Fernández Hall.  

Tales personas

No abundan tales personas
con las que se podría tener ese
contacto directo
donde sólo una mirada 
es un cable de acero puesto a temblar

Quizás no hubo ninguno de ésos
en tu clase en la escuela elemental
nadie que estuviera parado
observando a la gente un viernes a la noche
en el Dragón Azul
Ninguna de esas personas en el radio que abarca la mirada

Esas personas están dispersas al azar
a lo largo del tiempo
y a lo ancho del mundo
Quizás alguien tenía como
el proyecto de su vida el buscarte
aunque demasiado temprano
o demasiado tarde
y en un lugar completamente alejado
contando desde tus pies

Y tú estás ahí sentado
en una silla pintada de amarillo
en una casa de campo solitaria al borde de una tala
Quizás existan siete u ocho
personas apropiadas para ti que
exactamente ahora suben y bajan en una escalera 
en un pasillo cargado de ecos
con una taza de café vacía
y que no pueden hacerse a la idea
de pedir prestado un poco de pan rallado
a ninguna otra persona
más que a ti

Y él, ése allí que vive en pareja tan feliz
él quizás eligió así
como se elige entre distintos tipos de polvo para lavar la ropa.



Si te llevo conmigo de viaje

Si te llevo conmigo de viaje
si cuento una historia
son otras las reglas en vigencia

Ninguna meta sobreentendida
ningún terreno delimitado
ningún orden lógico de sucesión

entonces-
estamos de acuerdo:
desabrocha el cinturón del pensamiento
sobre todo en el despegue y el aterrizaje

si yo cuento una historia
no hay ninguna gramática a la cual amarrar las palabras
ninguna ordenanza cronológica
ninguna adecuación
u horario

entonces-
estamos de acuerdo:
puedes bajar la ventanilla
Y asómate con gusto hacia afuera



Mucho

Una buena cantidad de cosas uno ha pasado
visto y vivido
y experimentado
Andado a lo largo de algún que otro empedrado lluvioso
mordido una que otra uña
perdido uno que otro transporte y alcanzado otros

Algunas tristes realidades uno ha experimentado
y recién entendido
cómo la una tiene que ver con la otra
y uno ha sobrevivido desilusiones 
y mantenido el buen humor 
y cuando los filtros de café se acababan
entonces se han usado servilletas
Raspar el hielo del parabrisas
tantas mañanas heladas
Y se ha aguantado uno
Y se ha rebelado
no
con la frecuencia
suficiente

Vivido y visto
y mucho se ha visto
pasar de largo
muchas posibilidades 
dejadas de lado
y aprovechado otras
tan pocas veces

Muchos canastos habidos de ropa sucia
cargas llevadas
kilómetros recorridos recogiendo cosas
Mucho ha sido importante
y grandioso
y mucho se ha convertido en pequeñeces
cuando
se hace la cuenta final

Hemos comido hamburguesas
y cómo
quema la lengua los labios la garganta el paladar
un omelette delgado
en un restaurante hindú en una gran ciudad
se aprende
Y que hay diferencia entre el rábano picante y el jengibre
hemos experimentado
y cómo las estaciones se suceden
más y más rápido y se neutralizan las unas a las otras
hemos visto
y el ruedo de los pantalones vuelve a ser ancho de nuevo
por no sé cuántas veces ya en orden

Acumular cosas
hemos hecho
y si no nos hemos mudado con frecuencia
casi todo permanece y comienza a echar raíces
Uno recuerda erróneamente mucho
y de buena gana
uno recuerda en forma selectiva y
subjetiva
y se tiene casi siempre una gran comprensión por aquello
que uno mismo ha provocado
Sí, es suficiente con lo pasado
Y cuando personas adultas dicen
que son nacidas –ochentayuno-
entonces uno piensa que ya se ha vivido
Un Buen Rato

Y morir igual no se quiere
no todavía
no por un buen rato
porque sería tan triste de todas maneras
y nunca se sabe
no se sabe
nunca
se sabe
Puede haber todavía cosas olvidadas
en los bolsillos de las chaquetas arrumbadas:
un chicle
una moneda de cincuenta centavos
la llave desaparecida del candado de la bicicleta



Quiero creer en Zanzibar

Kuala Lumpur
Zanzibar
Abu Dhabi
Yo sé que esos nombres urdidos de las fábulas
son sólo denominaciones de
lugares corrientes para justo esa parte del mundo 
y ciudades
quizás países a veces
y paisajes
Uno que otro río completamente ordinario
- para esa zona ordinario, digamos-
o una montaña, normal para ese tipo de naturaleza
puede también tener un tal
nombre
urdido de las fábulas
Que inclusive con Mármara y el Bósporo
Casablanca y Montevideo
¡Surabaya!
¡Eldorado! 
uno puede tener una relación
completamente neutral y racional 
y no como yo cuando viajo con el dedo índice
y la alfombra voladora
Y no imaginarse nada
No esperarse nada que quizás
sólo haya sido una conjetura, una expectativa
un rumor de algo único
urdido de las fábulas
urdido de
No
la cabeza fría los pies sobre la tierra los puños sobre la mesa
y al diablo Shangri-La
Shangri-La puede borrarse de la faz de la tierra
Hay que ponerse en guardia realmente ponerse en guardia
estar alerta
tener cuidado
No hay que atreverse tan lejos como hasta
Samarkand (que queda en Uzbequistán por si no lo sabías)
y no se debe en absoluto robarse un cartel de tránsito con ese nombre
y llevárselo de contrabando en la valija
(aunque hubiera sido más práctico con una mochila)
en un vehículo todoterreno a través de un paisaje seco y bamboleante
en shorts color caqui
y control de pasaportes y vuelos con escalas en
numerosos lugares
para colgarlo –el cartel, digo-
en una pared de casa
Esto conduce irremediablemente a desengaños
ya se sabe
Y no es bueno

Pero yo quiero y no sé nada más
Quiero creer en Zanzíbar
y Ulan Bator
Quiero creer en la Sierra Madre
Surinam
Sargasso
y Katmandú
Dar es Salaam
Alma- Ata
Acapulco
Ipanema
Timbuktu
Titicaca
Koko Nor
y Kalahari
En el Danubio
y Sulitelma
Hasta en las Montañas Rocosas quiero creer
el Valle de los Reyes
el Pasaje de San Gothard
el Dogger Bank
el cabo sur de Öland
Metrópolis
Atlantis
y el Edén



Bob Hansson 

Bob Hansson nació en la ciudad de Helsingborg, en Skania, en 1970. Es uno de los más reconocidos poetas Slam de Suecia, destacado por su magnetismo en escena y la fuerza expresiva de sus poemas. Fue ganador del Primer campeonato  aún no oficial de Poesía Slam, en 1995. Luego de una adolescencia problemática, comenzó a escribir y se lanzó a la escena a los 17 años. Ha publicado varios libros de poesía, grabado dos discos y realizado innumerables presentaciones en Suecia y otros países. Ha trabajado en conjunto con diversos y destacados artistas suecos. Sus obras son: Heja världen!: dikter i urdur (¡Salud, Mundo!: poemas en tono mayor) de 1998, Lugna puckarnas Mosebok (El Libro más cool de Moisés) de 2000, Kom över på den här sidan: dikter för dig som föredrar livet (Pásate a este lado: poemas para ti que prefieres la vida) también del 2000, Här ligger jag och duger (Aquí estoy recostado y apreciado) del 2001, Bräcklighetens poetik (Poética de la fragilidad) de 2003, Här är vi (Aquí estamos) de 2004, Halleluja liksom (Aleluya, digamos) de 2005 y  la novela Gunnar de 2007. Sus dos discos son Kör, Solen, Kör del 2003 y Stålmannen är död (Supermán está muerto,  Rockópera Hablada), del 2005.

Bob Hansson ha sido y es un poeta popular, en constante interacción con el público. Destacado por su enorme poder de creación verbal, su ingeniosidad con el lenguaje y sus multisignificados. Se ha hablado de un “bobismo” y de cómo su poesía ha influido en otros jóvenes poetas. Los textos de Bob Hansson rozan con frecuencia el tema de la crítica social, reaccionando contra una sociedad mecanizada y materialista. Pero es justamente su talento con la palabra y sus posibilidades, que hacen que sus textos cobren vida: Bob Hansson es reconocido justamente por su humor, su carisma y su productividad poética. La poesía es, para este artista de la Palabra Hablada, una herramienta para lograr la comunicación; pero una comunicación que atraviese fronteras y amplíe los horizontes. En sus textos poéticos se mezclan su preocupación social con sus manías personales: memorias de infancia, alusiones a la sexualidad y observaciones cotidianas desde una mesa de café. En su reciente novela Gunnar, Hansson traslada a la prosa su ojo clínico para captar las absurdidades de la vida cotidiana, narradas con ese flujo arrasador de palabras que lo caracteriza.

No sorprende demasiado que el poeta favorito y constante fuente de inspiración de Bob Hansson sea el norteamericano Allen Ginsberg, quien, hace ya más de cincuenta años (exactamente el 7 de octubre de 1955), deslumbrara al sorprendido auditorio de la Six Gallery de San Francisco en un ya legendario espectáculo de poesía, recitando por primera vez su poema “Howl” (Aullido). Poema que se convertiría en uno de los puntos de referencia del entonces naciente movimiento Beat (beat generation), con el cual muchos de los seguidores de la Poesía Slam se sienten identificados.

De Bob Hansson se ha dicho, al igual que sobre otros talentos de la Poesía Slam, que escribe para la escena. Él mismo lo desmiente, afirmando que cuando escribe, escribe para el papel. “El papel es la piel y la casa del poema. Cuando hago mis presentaciones, entonces saco el poema del papel. La palabra sale de casa y dice ‘Salud’ al mundo”- afirma. Según este veterano de la competición poética, la poesía hablada y la escrita son dos fases distintas de la escritura, dos posibilidades distintas de generar encuentros, ambas tanto con ventajas como limitaciones. Hansson afirma que el motivo por el cual su poesía ha tenido más resonancia sobre un escenario que sobre el papel es simplemente porque las escenas son más numerosas que las editoriales o las revistas de poesía; y porque los escenarios de Poesía Slam som más valientes, más generosos y menos prejuiciosos que el ambiente literario y editorial.

Nacido en una ciudad relativamente pequeña en el sur de Suecia, Bob Hansson vive en Estocolmo desde los 18 años. Según él mismo, necesitaba del pulso de la gran ciudad para desarrollarse, escribir, pensar, en el ritmo vertiginoso de sus propio flujo verbal. Luego de varios años de intenso viajar, influido por la idea ginsberiana de que cada viaje es un nacimiento, Bob Hansson prefiere actualmente la quietud de su casa: “ya no se puede ser un extraño en ningún lado”-asegura- “todo el mundo se ha acostumbrado a los turistas”. 

A continuación poemas del libro Halleluja liksom (Aleluya, digamos). Estocolmo, W&W, 2005. 
Versión al español de Lilian Fernández Hall.  

Flor salvaje

Acabo sobre el vientre.
Acabo en ella.
Acabo en la cama abajo en el lugar de los pies donde mi
lengua es un submarino entre sus piernas.
Ella sólo se ríe.
Ella sólo me aprieta contra sí y dice
que parezco un sapo.
Yo empiezo a entender
que es su manera de
valorarme,
llamarme sapo.
Acabo sobre sus mejillas.
Acabo adentro del baño cuando ella
está en la biblioteca.
Llego a casa de mis amigos hecho una ruina.
Me preguntan qué ha sucedido.
No me atrevo a decir nada.
Ella tiene fotos de sus exnovios en la pared.
Hoy puso una nueva.
Esa tampoco era de mí.
Acabo con la boca abierta.
Acabo con la cara contra la pared.
Acabo con mis ojos tremendamente cerrados.

Le digo que es deliciosa.
Me pide que me deje de tanta conversación estúpida y
me aprisiona con sus piernas.
Acabo ahora mismo, le digo.
Pero si será del carajo, dice ella.
Que no puedas callarte la boca, dice ella.
Yo le prometo no decir nunca más nada.
Ni a tus amigos tampoco.
No, ni una palabra, digo yo.
Después me pide que guarde la mantequilla.
Eres terriblemente desordenado, dice ella.
Sí, digo yo.

Voy a la cocina. Guardo la mantequilla.



Sin título

La mañana es lenta.
Una lagartija.
La tarde y la noche son un
ave de rapiña planeando.
Aún así es la lagartija que va a lanzarse
y devorar al pájaro.

Yo estoy sentado al lado de mi ventana esperando
que suceda.
No tengo apuro.
La lagartija simplemente no puede perder.



Quizás pasta de dientes también...

uno quiere hacer algo
lindo
o por lo menos yo quería,
algo que permaneciera,
un cepillo de dientes particularmente especial
con pasta de dientes y todo que las personas
en la próxima era
quisieran ir a ver
-¡mira, mamá! ése es el cepillo de dientes de bob hansson
yo quería digamos sentirme capaz
depositar algo bello sobre la hierba
como una canción entre los árboles
para que los niños y los perros la canturrearan

pero lo saben todos
no se puede estar planeando esas cosas



Delgadas galletas de avena

Nos vamos a querer
y se va a ir todo al carajo

se va a ir todo al carajo y no es nada
que podamos remediar
más que querernos lo haremos
me vas a gritar que soy una
puta fláccida y yo responderé con altanería que
tus rótulas son lo más fláccido que yo he visto
y nos vamos a querer
no solamente por el reino de los cielos y besos y almas gemelas y oh esa sensación 
de que es perfecto todo el tiempo
no sólo por eso querernos querernos porque lo hacemos
cuando tú te avergüenzas de que yo practique healing con la comida
porque yo sufro cuando tu sólo quieres dormir
cuando tú odias que yo no escuche lo que dices
cuando yo estallo porque tú duermes con un hombres que sólo es un amigo
cuando el auto no trae problemas porque ni siquiera existe
y tú piensas que es mi culpa
puesto que ni tengo licencia para conducir
ni garage ni siquiera planos de ningún
garage
y yo no podré entender cómo alguien puede enojarse tanto
por una manchita olvidada y los restos de una manzana
¡SON SOLAMENTE LOS RESTOS DE UNA MANZANA POR LA MIERDA!

y nos querremos cuando tengamos tanto miedo de que el otro
vaya a desaparecer que nosotros mismos pensemos en hacerlo primero
y nos querremos cuando hayamos desaparecido
y nos arrepentiremos
y volveremos
y creeremos que no sabemos
y fingiremos que no hemos vuelto en absoluto
o que en realidad nunca fue tan rico con 
fresas y galletas de avena
y nos querremos y 
querremos escupir al otro a la cara y
llorar a sus pies y lo haremos y nos
querremos durante todo ese camino y no tendremos
ni una chance nos derretiremos sonrojaremos y nos bajaremos
los pantalones el uno al otro justo cuando yo gritaba MIERDA
pero me arrepentía.
Nos perdonaremos.
Dirigiremos nuestra fragilidad hacia un punto tan delgado que nos
quebraremos todos
y comeremos toneladas de galletas de avena
pensaremos que es tan típico de nosotros
un poco como los anillos de casamiento
o los mismos tatuajes en los talones que nunca
se nos ocurrirían pero sí las galletas de avena
y nos amaremos muy despacio arriba del guardarropas
nos caeremos
sencillamente nos caeremos y nos lastimaremos
y nos querremos

Hasta en el extremo de lo opuesto
hasta en adiós y hola
como aceptar que el mundo es okey
que le está permitido existir a pesar de su torpeza
y de las quebraduras de la fuente
en el amor

se va a ir al carajo
también
pero nosotros nos 
querremos y un bello día
quizás

hasta nos querremos a nosotros mismos...



Daniel Boyaciouglu



Daniel Boyacioglu nació en Estocolmo en 1981 y tiene raíces en la cultura asiria cristiana, de donde provienen sus padres. Ganó el campeonato sueco de Poesía Slam dos veces: en 2001 y 2002. Es autor de los libros de poesía: Istället för hiphop (En lugar de hiphop), del 2003, Gråter aldrig samma tårar två gånger (Nunca lloro las mismas lágrimas dos veces) del 2004, Haikupunchline: hundra dikter (Haikupunchline: cien poemas) del 2005, Fint som snus (Cosas lindas) del 2006 y ha grabado los siguientes discos: The Very Best del 2004, Visa 2007: Show me the money del 2005 y No Hit Wonder del 2007.

Daniel Boyacioglu tiene a la poesía como materia prima de su actividad artística y literaria. Con poesía empezó y a la poesía siempre regresa, dice él mismo. Se desempeña, sin embargo, en distintos ámbitos, por ejemplo como showman, en monólogos donde recita, canta y se acompaña con música. Ha tenido programas en la radio y ha incursionado esporádicamente en el teatro, actuando como invitado, hace un par de años, en una puesta en escena de la pieza Esperando a Godott de Samuel Becket, nada menos que en el prestigioso Teatro Real de Estocolmo (dirigido por Ingmar Bergman durante muchos años). Suele participar en los más variados eventos, desde lecturas maratónicas de Harry Potter hasta como presentador en distintos actos de solidaridad con movimientos internacionales, como la reciente revuelta de los monjes en Birmania. 

Aunque el mismo Boyacioglu desista de etiquetarse en algún grupo o representar a una minoría, su éxito en el mundo de la poesía y el espectáculo ha significado una novedad: la presencia de un joven integrante del grupo creciente de los llamados “inmigrantes de segunda generación”: jóvenes nacidos en Suecia pero con padres llegados de otras culturas. El hecho de haber nacido y crecido en Norsborg, un suburbio de Estocolmo con una alta concentración de inmigrantes, y pertenecer a una minoría cultural, enriquece la poesía y la actuación de Daniel Boyacioglu, quien introduce mucho del slang inmigrante de los suburbios, tanto en su vocabulario (en sus textos publicados) como en su entonación y pronunciación (en sus perfomances).

Los temas de su poesía combinan las grandes y frecuentes preguntas existenciales con una presencia de la cotidianeidad, de una manera poética, ingenua y fresca; quizás a veces demasiado espontánea. Para Daniel Boyacioglu, su poesía es sólo éso: “poesía, nada raro, sin rebusques” como él mismo lo dice. Sorprende, sin embargo, que este joven sueco/asirio declare tener como poeta favorito al chileno Nicanor Parra,  ya que  en él ha encontrado el vuelo en lo cotidiano combinado con la elegancia de la expresión poética. Los textos de Boyacioglu han madurado notablemente, desde los espontáneos y carismáticos poemas de su primer libro hasta los más concentrados de Haikupunchline. Una característica que sin embargo mantienen sus poemas es el trabajo concreto que el autor realiza con el lenguaje para dar a sus textos ritmo, sonoridad, oralidad. Repeticiones, asonancias, juegos de palabras, rima, prosa poética o frases truncadas. Son poemas escritos fundamentalmente para ser leídos en voz alta, aunque también funcionen en el silencio del papel. En su último poemario, sin embargo, Daniel Boyacioglu parece encontrarse frente a un cruce de caminos: una especie de cansancio o indecisión se hace presente en sus páginas: ¿hasta qué punto su éxito en el ambiente de la Poesía Slam y como showman, impulsan su desarrollo como poeta o lo frenan? Algunos críticos han dicho que así como muchos poetas se hacen un nombre después de publicar, Boyacioglu publica porque su fama lo antecede. El mismo autor dice en uno de sus poemas (en su último libro Cosas lindas) : “Abandono esta cosa de la poesía/ ya tienen mi nombre/ hay en realidad tantas cosas/ que pudiera hacer”. Y probablemente, este joven poeta (¡de apenas 26 años!) esté en un momento de su carrera en que deba decidir su camino, demostrar su garra poética y posiblemente, explorar nuevos caminos.

En su más reciente álbum, No Hit Wonder, editado a mediados de 2007, Daniel Boyacioglu retorna con renovadas fuerzas a la música, en un estilo que conecta tanto con el rap, el funk y el hiphop y donde siempre los textos (propios) se ubican en un primer plano.

A continuación poemas extraídos de Gråter aldrig samma tårar två gånger (Nunca lloro las mismas lágrimas dos veces). Estocolmo, W&W, 2004. Versión al español de Lilian Fernández Hall.



Discurso antes de un entierro

Tuviera que estar presente en tu entierro
no vendría con traje de luto,
Tuviera que decir un discurso diría:
No tengo nada bueno que decir
sobre este hombre,
no lo conozco.
Lo que sé es que fue un hombre pésimo,
de la peor clase
una pesadilla entre las pesadillas
Una pesadilla que yo hasta hoy
he mantenido viva
para minimizar el riesgo
de llevar el nombre que me tocó en suerte
Nada está olvidado
Nada está perdonado.
Ya que estamos reunidos podemos aprovechar para constatar
que murió una muerte democrática
Una muerte a enterrar.
Una rosa deposité en la tierra
para diferenciar entre la rosa y donde yacía
Si lloré, lloré lágrimas de alegría
y dije mi adiós. 

                 

Para quien ha llorado lo suficiente

En una ciudad ventosa en ese momento de la vida
y en ese lugar sobre la tierra en que el viento había conseguido 
    secar
sus lágrimas para siempre tenía yo motivos para llorar

Yo la había tomado por ese tipo de artista
que me da dolor de estómago de sólo encontrar

Ella me iba a llevar en auto de vuelta a la estación

Ellos compraron un auto juntos en el 91
al año siguiente, en el 92 murió su marido

Yo lo lamento, porque es lamentable

y le cuento sobre mi padre, una cosa cada uno
es suficiente
con la edad suficiente para ser mi madre
se convierte en mi hermana y yo en su hermano
comunión en el dolor que despertamos

algunas cosas te tocan
otras pasan de largo como el viento
Cuando sopla más fuerte
se derrama una lágrima

Ella dijo que se quedaría con su auto
y cuando lo lavaba se sintió bien.



Paréntesis

nadie despidiéndome
no estábamos de acuerdo
no les parecía que yo viajara

nadie dándome la bienvenida
por qué me la darían
yo no me consideraría en destino

compañeros de viaje
que no hacen el mismo viaje
sonríen y yo les sonrío de vuelta

ni siquiera cuando compro café
me quito los audífonos

puesto que sé lo que cuesta

por cada mentira adquirida
consigue algo a que llamar verdad

el tiempo una invención
pero el viaje verdadero
en todo caso el vivido

nadie dándome la bienvenida
por qué me la darían
yo no me consideraría en casa



Qué agradable sacarse los zapatos

Qué agradable sacarse los zapatos y las medias también
me doy cuenta ahora que hay cosas que tengo que hacer
que serán difíciles de realizar
que no puedo contarle a nadie
porque si no no las haré nunca.
En este preciso momento quiero doblegarme,
rendirme y oponerme a todo lo que soy
o rechazar aquello que creo ser
o nada en absoluto

Había una maestra una vez
que dijo que yo quería llegar tarde a una prueba
porque llegué tarde a una prueba
y que tenía que ver con el inconsciente
la rendí
lo hice finalmente.

Mira si me librara de despertar
y no volviera a casa
o si me librara de despertar
y llegara a casa

con un barco siguiente o con un autobús más tarde

no hay árboles o tapetes con los que yo sueñe
con lo que yo sueño es mucho más un sueño



Bautismo

La sangre es más fuerte que el agua.
Las manchas de sangre son también más difíciles de lavar
que las manchas comunes de suciedad.

Me reí casi hasta desfallecer
cuando leí lo que alguien había escrito
sobre el afiche de información de las Autoridades de Carretera
en el metro bajo el lema
don´t drink and drive
en letras negras:
just smoke and fly.
Con frecuencia se mezclan cosas,
palabras que no debieran ser mezcladas.
Pánicoangustia, pánico es una cosa
angustia otra. La silla, una silla.
Por qué no abriste la puerta
antes de estrellarte contra la pared
o es que no había ninguna puerta
detente, corre alrededor, haz algo.
Sobreanalizar es otra
o pensar demasiado
Yo pienso bastante
en gente que no piensa nada
antes de abrir sus bocazas:
La sangre es más fuerte que el agua.
Las manchas de sangre son también más difíciles de lavar
que las manchas comunes de suciedad.



Los agujeros

(lee el libro como un libro cualquiera
como si tuvieras una prueba el martes)

Cómo podría no escribir esto
yo escribo yo escribo lo que puedo
y llevo adelante mis batallas
Hojea y sigue hojeando
entre las páginas del libro
algo puede si se mira
descuidadamente
parecer unos dos puntos
no uses ninguna lupa
cuando leas mi poema
yo no usé ninguna cuando lo escribí.
Los agujeros que puedan aparecer cuando busquen
no estaban pensados
y es algo que ustedes crean solos
Hojea y sigue hojeando
entre las páginas del libro
no uses ninguna lupa



El orden mundial

Las llaves y el tabaco en el mismo bolsillo
en el bolsillo izquierdo de adelante en el sentido del viaje

y el celular en el otro

la billetera con el dinero, la tarjeta de crédito, la foto de mi hermano
y los recibos guardados del taxi en el bolsillo derecho de atrás

suelo contar hasta cuatro
para cerciorarme de que llevo todo

Lo valiente es no tener miedo
por más románticamente que utilices el término
no puede la gente que reconoce su miedo
llamársela valiente
cuando justamente es a eso a lo que les tienen miedo

a veces me siento como un viejo bien vestido
que se va pudriendo por dentro y que a pesar de mi disfraz
emana un hedor reconocible aún a la distancia

cuatro años son o nada
o cuatro largos a atravesar
depende de lo que se haga de ese tiempo

Es mejor tocar una canción de Jimmy Hendrix
en una versión que carece de guitarra
un trapo empieza tarde o temprano a oler a trapo

Le toma un instante a un superstar
moverse de un lugar a otro
y viajas junto a alguien
ya como una pareja
toma más tiempo
que cuando viajas solo

Es por ejemplo mucho menos simple
cruzar la calle
si hay mucho tráfico
no se puede en realidad tomar una decisión
por dos y a la vez arriesgarse
además que las muchachas caminan más despacio

Lilian Fernández Hall.  Bibliotecaria, traductora y cronista argentina residente en Suecia. Egresada de la carrera de Letras de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata. Colabora en diversas publicaciones, impresas y digitales, de América Latina y de Europa. Corresponsal en Suecia del Expreso Latino de Roma.Trabaja actualmente en una biblioteca pública con especialidad en literaturas extranjeras y coordina un círculo de lecturas en español en el  Instituto Cervantes de Estocolmo. Lleva el blog:  www.fernandezhall.blogspot.com