Resolución de año nuevo
Tengo que dejar de escribir poemas tristes
porque un día los verá mi mamá
y no quiero que piense
que lo de la psicóloga no está funcionando
(no sé si está funcionando realmente,
pero me cae bien,
y no me quiero cambiar.
Mami, ya puedes dejar de leer,
mira,
te he inventado unas mariposas
que cantan hasta besar las flores
que crecen en el horizonte.
Mira,
creo que te están llamando,
corre,
no te esperan)
Empecé a escribir esto
sin saber dónde iba a terminar,
como las hojas de un diario de cuando tenía doce años
que taché cuando tenía diecisiete.
Me he borrado tanto
que corrijo a la gente que pronuncia mal mi nombre
más por inercia que porque todavía sienta que me llame así.
Dudo un segundo en voltearme cuando lo oigo,
como el timbre de una casa
que no es mía
Siempre termino aquí,
the data is never fully removed
from the hard drive,
I’m afraid
Cada vez que recuerdo que no recuerdo casi nada
de cuando era más,
más aún,
más pequeña,
me dan ganas de llorar,
de encontrar todas las fotos guardadas
en cajas de zapato,
en clósets,
en cerebros más viejos
y tejerlas con hilo rojo
en una pizarra gigante de evidencia,
forrar mi habitación,
la sala,
el baúl del carro
de veintidós años de no saber,
de estar desconectada del remolino mar adentro
de cosas que me rodean
Por favor no me pregunte de dónde soy, policía,
que yo no sé,
que no sé por qué soy tan blanca,
por qué parezco china,
no sé,
se lo juro.
Mis padres no vinieron de tan lejos
(ni mis abuelos,
bisabuelos,
la piscina llena de cosas aleatorias)
a esta isla,
a esta ciudad donde sólo crece una imitación muy cara de Miami
En medio de escribir esto me llamó mi abuela
Feliz año nuevo, princesa bella,
que seas feliz
Entonces lloro sin que me oiga,
como cada vez que alguien
me pide que haga lo contrario.
Escribo borroso
aohar
ohara
ahora
lo único que hay
Como siempre no recuerdo nada
de lo que iba a seguir escribiendo
Tumbo las pizarras
y mando a la mierda las fotos en un
funeral vikingo,
ahóguense,
no me sirven de nada,
yes,
I do want to permanently
erase,
forget,
bury-bury-kill
the items in the trash.
Las mentiras se escuchan mejor
en ventana blanca de la computadora,
botón azul,
empty trash.
Riégala en las gavetas rotas de mi cuarto,
laptop poderosa.
Espero el abrazo metálico
de tus microprocesadores y tu conexión a wifi
como los evangélicos esperan a Jesús
en una valla de la 27.
Estamos tocando la puerta del despacho
Sr. Presidente,
llegó el reporte,
todo va mal.
Hay invasores de pies gigantes,
traen tierra extraña consigo.
Vibraciones que no entendemos.
Las hemos llevado a las universidades,
los científicos,
el último peldaño.
Nadie sabe nada
Díganos qué hacer,
es urgente.
¿Qué hace?
¿Por qué no mira que
quieren quitarnos
el abismo?
No pueden hacerlo;
el vacío es nuestro
el centro de gravedad
no les pertenece.
¿Por qué no hace nada?
La tarde está casi muerta,
pero eso no es excusa
No abandone a los niños,
a la gente que trabaja,
que trae el sol en la espalda.
Mire como quieren robarnos
el agua,
las manzanas,
los secretos
¿Qué vamos a hacer
cuando se roben todos
los secretos?
Del otro lado
nos avisan,
óiganlos:
tambores,
gritos.
El fuego,
el fuego,
¿qué no ve que se quema todo?
Ya no queda nada
Mire,
la s le
tra s
s e
h an
i
d o
Se lo dije
Ya no hay caso
Adiós para siempre
Qué triste,
Qué triste.
Janis Joplin es la peor enemiga de Aquaman
Hoy oí a una señora
igualita a Janis Joplin
decir que debemos tener peces
para que absorban la mala vibra
y se mueran
en vez de uno
Ahora sé
que todos los manatíes,
tiburones y
atunes de lata
del acuario
murieron por ella,
que tiene sus almas en la verruga
de su buche derecho
Me voy a comprar
un pez beta
porque creo que se dio cuenta
de que escribí
un poema malo sobre ella
y no quiero que
me haga mal de ojo
Thaís Espaillat (Santo Domingo, 1994) nunca sabe qué decir de ella. Mejor lean su blog que actualiza cuando se acuerda de sus fans imaginarios, saltedeaqui.wordpress.com